Después de unos días llenos de júbilo y alegría, un numeroso grupo de hermanos ha trabajado intensamente en la Cruz de mayo de la Hermandad que lucía esplendorosa en el tradicional entorno de la Calahorra. Vaya desde esta ventana digital el agradecimiento profundo que siente la Hermandad hacia todos los hermanos que han colaborado con generosidad en las tareas de montaje, desarrollo y desmontaje de esta nueva edición de nuestra Cruz de mayo.
La apertura de estas jornadas festivas la ofreció la Hermandad a la Asociación Autismo Córdoba. El viernes 27 recibimos por la tarde a un grupo de niños con sus monitores a los que les preparamos una visita por todo el entorno de la Calahorra, visita al Molino de San Antonio y a los Sotos de la Albolafia guiados por varios hermanos. Tras la interesante visita, donde los niños pudieron ver de cerca la riqueza ecológica del Guadalquivir e histórica del entorno, la Hermandad ofreció una merienda donde todos compartimos un rato extraordinario de convivencia. A los postres, la Presidenta de la Hermandad hizo entrega de un cuadro con la sagrada imagen del Señor del Silencio para que la tengan en la Asociación. Con profundo agradecimiento los niños recibieron el presente de la Hermandad, quedando emplazados a la próxima actividad que será, D.m, una visita guiada a la Catedral de Córdoba.
Al atardecer nuestro Consiliario, Iltmo. Sr. D. Antonio Murillo Torralbo, procedió a la bendición de la Santa Cruz que, vestida con margaritas blancas este año, campeaba sobre la magnífica vista que ofrecía el balcón del Guadalquivir. Muchos fueron los hermanos de la cofradía que se sumaron a este sencillo acto con el que confesamos nuestra fe. Concluyó esta primera jornada festiva con el encuentro fraterno que tuvimos con ADEVIDA cuya Presidenta, Isabel Guerrero acompañada de varios miembros de la Asociación, agradeció profundamente todos los detalles que la Hermandad tiene con esta institución que defiende la Vida desde su concepción. Terminó el encuentro con la entrega que hicimos de un cuadro de María Santísima de la Encarnación para que tengan a nuestra Titular en su sede.
El sábado 28 de abril la Hermandad tuvo un sentido homenaje a las tres cuadrillas de costaleros y a sus respectivos capataces y auxiliares. Para ello, les ofreció un perol de convivencia en agradecimiento a su esfuerzo y entrega. Al final del acto fraterno, la Presidenta hizo entrega de unos recuerdos a los capataces. El veterano capataz del Cristo del Amor, Lorenzo de Juan Luque en nombre de todos, agradeció el gesto con unas emocionadas palabras. El domingo 29 fue el turno del Grupo Joven de la cofradía quienes trabajan con intensidad y humildad en la Hermandad. La Presidenta les hizo entrega de unos cuadros con las imágenes de nuestros Sagrados Titulares en recuerdo de ello.
Estos días de Cruz de mayo han servido para reforzar lazos fraternos entre los hermanos a través de la convivencia festiva que sirve para que sepamos mirar a un futuro común donde tengamos como objetivo la HERMANDAD. Laus Deo.
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